Guerra y gentrificación en Kurdistan

En las callejuelas de Sur, centro histórico de Aden-Diyarbakir (Kurdistan).
Hilton Garden Inn in Diyarbakir. http://wowturkey.com
Hilton Garden Inn in Diyarbakir.

Gentrificación y limpieza étnica usan las mismas técnicas, las mismas máquinas; el alcance, la intensidad, es diferente, pero sus objetivos y estrategias son parecidas. Lo vemos en Turquía: mientras en Istanbul el gobierno derriba los gecekondu y otros barrios populares para abrir nuevos espacios para el comercio y para los ricos, en la región de Kurdistan ocupado desaloja los residentes tradicionales promoviendo el turismo y las mejora estética de las ciudades históricas. En la capital, la ciudad de Amed, que el gobierno turco llama Diyarbakir, el barrio histórico de Sur está sufriendo un ’urbicidio’, con más de 30.000 desplazados y el 70% de edificios derribados.

En la otra orilla del río Tigris (que en kurdo se llama Dicle) los habitantes del barrio de Fiskaya aún dejan sus puertas abiertas. Se conocen entre ellos, y viven el colectivismo como un hecho natural. Pero las calles son empinadas, estrechas, y difíciles de transitar para la policía; además, sus habitantes votan casi todos para el partido pro-kurdo HDP, y simpatizan para el prohibido PKK de Abdullah Ocalan. Por ello el barrio representa un problema para el gobierno turco, que lo enfoca exactamente como en Istanbul (véase los barrios de Sulukulé y Tarlabase): ofreciendo a los habitantes pisos en los nuevos edificios de viviendas protegidas de TOKI, arriba de la montaña. Muchos las aceptan como una manera de superar la incomodidad de vivir en sus viejas casas; pero otros ven todo el proyecto como un ataque a la cultura de su comunidad, a través de la destrucción del barrio, la renovación urbana y la ‘regeneración’, junto a la anonimidad en qué los habitantes se verán encerrados después del traslado hacia los nuevos pisos.

Urbicide in Sur. Source: @syndicalisms